Lover Divided - Capítulo 11

Zsadist estaba estresado mientras patrullaba junto a V y Butch.

Hacia unos días desde que había estado con Nabilah y desde entonces, ella lo había estado esquivando.

Ni siquiera había aparecido a su cita en el cine, a pesar de que lo había preparado todo, como un auténtico gilipollas. Hasta le había pedido a Fritz que le enséñala a usar la máquina de las palomitas.

Como si fuera un loco enamorado.

Y encima no había ni rastro de Muhrder y sus antis.

Necesitaba matar algo, pero ya.

- Hermano, me estas poniendo nervioso, ¿verdad?

Zsadist miró a Vishous sobre su hombro, dándose cuenta de lo que estaba haciendo. Tenía su navaja de bolsillo abierta y la tiraba al aire y la volvía a coger sin ser apenas consciente.

- Lo que tú digas V.

- ¿Qué te tiene así, Zsadist?

- No te incumbe, poli.

- Es la doctora, ¿no?

- Pues claro V, tiene que serlo.

- Sigo aquí, puedo oíros.

Vishous bufó.

- Lo dices como si nos importara.

- Espera, te mola la doctora. ¿Es eso?

Zsadist fulminó a Butch con la mirada.

- No me mola nadie. Cuidado con lo que dices, poli.

Siguió jugando con la navaja, intentando escuchar si había algún enemigo cerca al que poder destrozar.

- V, estoy confuso. Tú estabas cuando Rhage nos contó lo que Kihara le contó a Lohrena sobre la doctora y Phury…

La mano de Z se movió sola, y la navaja voló por el aire con un siseo, hasta clavarse en el hombro de Butch.

- ¡Hijo de puta!

- Z, que cojones haces.

- ¿Que pasa entre Nab y mi hermano?

- Nada tío…

Zsadist agarró a Vishous por las solapas de su abrigo de cuero, apoyándolo contra la sucia pared del callejón.

¿Qué. Pasa. Entre. Nab. Y. Mi. Hermano?

Estaba temblando de la rabia porque lo sabía. Sin que se lo contaran. Zsadist lo sabía.

Phury había estado con su hembra.

*-*-*-*

- Venga tío cuéntame cómo fue. ¡Quiero de-ta-lles!

- Rhage, no sé cómo coño te has enterado. Pero no voy a contarte nada. Así que vete a la mierda.

Sí que sabía cómo se había enterado. Kihara se había ido de la lengua. Y si Hollywood lo sabía, su hermano no tardaría en saber que él también se había acostado con Nabilah. Vaya hermano estaba hecho.

Joder.

- Venga ya, no seas así. ¡Somos Hermanos! Los hermanos se cuentan estas cosas.

Miro a Rhage, pensando en su verdadero hermano. Rhage levantó las manos en señal de disculpa. Era obvio que Phury jamás le contaría su suyo con Nab a Zsadist…

Siguió caminando por Tenth Street, dejando atrás los clubes como el ZeroSum o el Screamers. Adentrándose en las zonas más chungas de Caldwell.

Ya estaba del todo recuperado así que estaba deseando encontrarse con unos antis que hacer desaparecer. Y si se encontraba con Muhrder, mejor aún.

Santa mierda.

El olor de sangre era débil, pero estaba ahí. Y era de algún vampiro. Rhage debió olerlo también porque ambos echaron a correr hacia el callejón de donde provenía.

Lo que se encontraron fue como eh-un-momento-que-cojones-pasa-aquí.

Butch se estaba intentando taponar una herida en el hombro, mientras Zsadist tenía a V apretado contra la pared.

- Z tío que haces.

Zsadist giro la cabeza hacia Rhage, pero su mirada se clavó en Phury.

Tenía los ojos completamente negros, el labio levantado mostrando los colmillos, cosa que con la cicatriz que tenía, lo hacía parecer más salvaje aun.

- Tu…

Su hermano soltó a V y vino hacia él.

- Te has acostado con ella.

No era una pregunta.

- Sí.

Los ojos de Zsadist se hicieron más oscuros, si eso era posible. Tenía las manos cerradas en puños, preparado para atacar a su propio hermano.

- ¡Es mía!

- No te vinculaste con ella. Aun puede ser mía.

- ¡Pero fui el primero!

Los demás hermanos los miraban estupefactos.

- Whoa Whoa Whoa. Espera. ¿Qué? Me estáis diciendo, ¿que la doctora ha estado con los dos?

Rhage señalaba entre uno y otro y soltó un largo silbido.

- Vaya con la doctora.

- Ni una palabra, Hollywood.

- Cállate, Hollywood.

Los dos reaccionaron a la vez. Joder, ¿cómo cojones iban a solucionar esto?

La respuesta era obvia.

Tenían que hacer un cohntehst.