En la oficina de Wrath, todos los Hermanos estaban
alterados. Rhage les había contado lo que sabía y les había mostrado la nota.
Todos reconocían la letra. Ahora en lo que debían ponerse de acuerdo era como
encontrarle y acabar con él. Por mucho que les doliera.
- ¿Estás seguro de que Lohrena no sabe nada? ¿No ha
estado en contacto con él en todo este tiempo?
- No Zsadist. No.
- ¿Cómo lo sabes?
- Porque me lo ha dicho. Y yo la creo.
- Solo porque te la hayas follado un par de veces...
Rhage se movió tan rápido que nadie pudo detenerlo.
Apretó a Z contra la pared, sus ojos blancos como la nieve y los colmillos
completamente extendidos, listo para proteger el honor de su hembra. Los demás
hermanos no interfirieron, aunque Phury estaba justo a su lado, listo para
defender a su gemelo.
- Esa hembra va a ser mi Shellan y la madre
de mi hijo, así que más te vale respetarla si no quieres convertirte en comida
de mi Godzilla interno, ¿me entiendes?
- Lo siento Rhage, no pensé que ibas tan en serio.
El olor de vinculación lleno la oficina de Wrath,
sorprendiendo a los hermanos. Rhage soltó a Z y se sacó una piruleta del
bolsillo, mientras sus ojos volvían a su azul habitual.
- La amo. Así que si, es en serio.
Vishous silbó.
- ¿Ella lo sabe?
- Nop. Y no pienso decírselo por ahora. Me vio en el
Iron Mask, así que ahora mismo me odia. Solo ha accedido a venir porque tiene
miedo. Ni siquiera ha aceptado ser mi Shellan aun.
- Uhm... ¿y no se ha dado cuenta de que te has
vinculado con ella? ¿Que no hay vuelta atrás?
- Ah... no. Me vinculé con ella hace 4 meses. Estoy
haciendo todo lo posible para que no se dé cuenta. Ni siquiera le he contado lo
de mi maldición.
Se pasó las manos por el pelo.
- ¿Podemos volver al tema? Muhrder sabe dónde está
la mansión.
- Pero no puede entrar. Cambiamos todos los códigos
de acceso y los Doggen saben que no les pueden abrir la puerta, y que
deben avisarnos de inmediato.
Rhage asintió.
- Lohrena se quedara en la mansión. Solo tendrá que
salir una vez al mes para ir a la clínica de Havers. Me gustaría una escolta
esos días, para prot...
- Hecho.
Rhage asintió agradecido y Wrath sonrió mostrando
sus colmillos.
- Cuéntanos hermano, ¿cómo te sientes al saber que
vas a tener un crio?
*-*-*-*-*-*-*-*
Lohrena siguió a Kihara por toda la mansión, que era
enorme. Terminaron delante de la puerta de Rhage.
- Él ahm... quiere que te quedes con él.
- Prefiero la habitación de la jaula.
Kihara sonrió.
- Rhage es un buen macho Lohrena. Os cuidara bien y
será un padre y un Hellren estupendo.
- Si claro, mientras se acuesta con una guarra
distinta todas las noches. No gracias.
- Eso no lo hace por gusto, ya lo sabes. Además
ahora que te tiene a ti...
- ¿Que no es por gusto? Pues vaya, no parecía que lo
estuviera pasando demasiado mal, cuando lo vi anoche.
- Lohrena, tu... tu no sabes nada de su maldición,
¿verdad?
- ¿Qué maldición? ¿De qué estas hablando?
O por fin capitulo!! Y muy bueno! .. gracias!!
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