sábado, 28 de diciembre de 2013

Lover Submissive - Capítulo 76

Volvieron a la mansión al día siguiente. Rhage habló con Wrath pero cuando salió de su oficina, no quiso hablar con nadie más y se encerró en su habitación.

Por la noche, Butch y Vishous volvieron al Commodore.

- ¿Crees que Rhage estará bien?
- Sip.
- ¿Qué quiso decir con eso de que te equivocabas y que tiene que ver Lohrena...?
- No te lo puedo decir, pero pronto lo sabrás. Yo nunca me equivoco.
- ¿Nunca?
- Nunca.
- Entonces, ¿sabías que yo sería tuyo?


Vishous lo miró desde donde estaba sentado, envuelto solo en una toalla. Butch se lamio los labios.


- Nop, eso nunca lo vi.
- Hmmm quizás debería recordártelo...

Soltó su propia toalla, dejándola caer al suelo y quedándose desnudo ante Vishous. Este le dedicó una sonrisa felina.

- Creo recordar que te prometí un castigo por ese comportamiento desobediente durante tu necesidad...
- Joder si...

Butch comenzó a acariciarse, recibiendo una mirada severa de Vishous. Este ya había sacado su lado dominante y a Butch le encantaba.

- Ven, vamos a probar algo nuevo...

Vishous cogió las cadenas con esposas que colgaban del techo.



Eran perfectas para mantener a alguien de pie con los brazos en alto. Un buen castigo...

- ¿Confías en mi poli?
- Siempre Nallum. Mi Lheage.
- Bien. Levanta los brazos.

Vishous lo esposó y se acercó a él para besarlo, quitándose la toalla mientras lo hacía.

- Separa un poco las piernas. Así es.

Cogió una venda para los ojos y una mordaza para la boca.

- Vamos a ver si realmente aguantas ser un buen sumiso... como no vas a poder hablar, si quieres que pare, entrelaza las dos manos, ¿vale?

Butch asintió y Vishous le puso la venda y la mordaza, sabiendo que así intensificaba todos sus otros sentidos. Cogió un flagelador y una vela y con un movimiento practicado, azotó a Butch en el trasero varias veces, dejando unas marcas coloradas. Butch gruñó alrededor de la mordaza y su polla estaba completamente erecta, pidiendo atención.

- Dios, como te quiero poli.

Butch soltó otro gruñido y Vishous se puso delante de él, sus pollas rozándose. Observando las manos de Butch por si hacia el gesto para que se detuviera, Vishous volcó la vela, dejando caer la cera caliente sobre sus pollas, provocándoles a los dos unos orgasmos intensos e inmediatos. 

2 comentarios:

  1. Gggrrr, estando las cosas así, hasta a mi también me dan ganas de gruñir, y con ganas jajajaja. Uuh, pobre Rhage, me tiene toda preocupada.. Espero ansiosa conty! Estuvo genial ésta.
    Cuídate y Saludosc:

    ResponderEliminar