Lover Embraced - Capítulo 14

- ¿Has perdido la puta cabeza?

Un millón de excusas pasaron por la mente de John. Desde me-caí-y-sus-labios-simplemente-detuvieron-la-caída, hasta, no-se-de-que-me-hablas-aunque-la-habitación-olía-a-sexo. Blay no se creería nada.
- No era mi intención…
- ¿Y qué? ¿Tus labios simplemente aplastaron los suyos? ¿En qué coño estabas pensando John?
- No estaba pensando.
- Obviamente. Joder, mierda John. ¿Qué crees que haría Qhuinn si os encontrara? Te despellejara vivo, tío. Mi Hellren acaba de recuperar a su pequeña y ya estas intentando meterte en sus bragas?
- No sé qué ha pasado. Simplemente pasó.
- Debería de partirte la jodida nariz. O algo.
Blay realmente debía de estar enfadado porque no paraba de soltar tacos… y el estaba de acuerdo. Se merecía un puñetazo en toda la cara por esto. Enderezó los hombros y asintió a su amigo, preparado para recibir el golpe.
Blay simplemente negó con la cabeza.
- ¿Qué pasa con Xhex?
John se tensó.
- ¿Qué pasa con ella?
- Mierda John, llevas años de luto por ella, ignorando a todas las mujeres a tu alrededor, y cuando por fin decides seguir adelante con tu vida, ¿la eliges a ella?
Blay señaló a la puerta y el levantó un hombro con indiferencia. No podía explicarlo, joder, ni siquiera sabía si había nada que poder explicar. Ni el mismo entendía nada de lo que estaba pasando.
- ¿Hay alguna posibilidad de que vuelva a ocurrir?
John movió su cabeza frenéticamente.
Ya había decidido no acercarse más a ella. Su amistad con Qhuinn era demasiado importante para arriesgarla por una pretrans que ni siquiera conocía.
- Bien, porque si Qhuinn algún día se entera…
- Lo sé.
Blay asintió.
- Venga vamos. Hemos quedado en la oficina de Wrath otra vez. Va a poner las condiciones para la caída de Havers.


Lilly cerró la puerta con un suave clic. Había aprendido varias cosas muy importantes al escuchar la conversación.
Qhuinn, su padre, no quería nada entre ella y John.
John estaba de luto por alguien llamada Xhex.
No pensaba volver a besarla.
Inhaló profundamente, aun oliendo su olor que permanecía en el aire.
Eso ya lo verían.
 

*-*-*-*-*

 

Qhuinn estaba esperando fuera de la oficina de Wrath, andando de un lado a otro. Entendía las razones del Rey por querer informar a Marissa, pero joder, estaba tan preparado para matar a Havers, que sus manos temblaban con solo pensarlo. Esperaba que Blay volviera pronto. Necesitaba a su Hellren a su lado.

Le había pedido que le llevara algo de comer a Lilly. Realmente debería de haberlo hecho él mismo pero estaba demasiado emocional, y todos sabían que él no era muy bueno esta mierda. Frunció el ceño al ver a Blay y John caminar hacia él. Los dos estaban jodidamente tensos y no le miraban a la cara. Miró bien a John. Si no supiera mejor, pensaría que su hermano había tenido suerte y estado con alguna tía. Labios hinchados, olor intensificado… Sabía que no era posible porque aun estaba sufriendo por lo de Xhex… Aunque había algo que no cuadraba, simplemente no sabía el que.
- ¿Qué coño está pasando?
Blay le dio un beso rápido.
- Nada nallum.
Qhuinn los miró, sospechando, pero decidió dejarlo pasar.
- ¿Le has llevado algo de comer?
- Si, pero John ya le había llevado una bandeja.
Qhuinn miró a John, que parecía muy interesado en el suelo.
- Ah. Vaya, gracias tío.
John levantó un hombro y habló con señas.
- También le he llevado algo de ropa. Parece que tiene la misma talla que Nalla, asi que le pedí algunas cosas prestadas, por lo menos hasta que le podamos comprar las cosas que le gusten.
- Genial. No había pensado en eso. Gracias tío.
Había algo… algo que no le estaban contando. Lo descubriría tarde o temprano...
- ¡Qhuinn!
Layla apareció detrás de él. Aun no había tenido oportunidad de hablarle. Ella lo abrazó como no había hecho en años.
- ¡Está viva! ¡Nuestra pequeña está viva!
Sonrió.
- Lo sé.
- Realmente es un milagro.
Su sonrisa era radiante y feliz, sin la tristeza que había mostrado su rostro durante los últimos 25 años.
- Si que lo es.
- ¿Ella está en su habitación?
- Si, John y Blay le han llevado algo de comer y ahora estamos esperando a Wrath. Ve a verla, ella necesita a su mahmen.
Layla negó con la cabeza.
- Asesinare a Havers primero. Solo entonces podre conocerla. Mi hija. Nuestra hija.
Le besó la mejilla y un sutil gruñido lleno el pasillo.
Xcor.
Sonrió cuando el otro macho agarró a Layla, sacándola de entre sus brazos, y la besó posesivamente, para que todos supieran a quien pertenecía.
Las puertas de la oficina se abrieron y Butch y Marissa salieron juntos. Marissa fue hacia Layla y la abrazó.
- Me alegro tanto de que la hayas recuperado.
Luego fue hacia Qhuinn, abrazándolo a él.
- Haz lo que tengas que hacer. El se lo merece.